La Virgen del Mar es la patrona de la ciudad de Santander, y la estatuilla de esta virgen se encuentra en una preciosa ermita, situada en un saliente de tierra rodeado de mar, en el que, como se ve en la foto, los saltos de agua al chocar contra la misma cuando la mar está picada es algo digno de fotografiar.
Es un sitio al que llevo a todas las personas con las que viajo a Santander. Es un lugar muy singular y con mucho encanto, tanto natural como espiritual.
En las fiestas dedicadas a esta virgen en verano, se realiza una romería alrededor de la ermita, y es una gran devoción la que la gente expresa a esta divinidad.
Creo que no es necesario decir nada más. Espero haberos cautivado con las imágenes y las palabras que he dedicado a este paraje y que, en algún momento, os animéis a visitarlo.
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